Hablamos de unos parásitos hemípteros (chupan sangre) que aparte de la molestia de la picadura nos pueden transmitir enfermedades graves y que en algunos casos pueden causar la muerte.
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| K. Urresti. Heraldo de Aragón. https://www.heraldo.es/especiales/ciclo-vital-garrapata-infografia/ |
Las garrapatas son artrópodos de la clase arácnidos. Se diferencian claramente de los insectos porque, salvo las larvas, disponen de ocho patas como se aprecia en la fotografía.
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| Photo by Scott Bauer. (USDA ARS). Wikipedia |
En el mundo hay cerca de 1.000 especies principalmente repartidas en 2 grandes familias: Ixodidae (duras) y Argasidae (blandas).
Las que más nos afectan, tanto a las mascotas como a los humanos son las duras, que pueden encontrarse fácilmente en nuestra comarca debido principalmente a la sobrepoblación de conejos.
Mi experiencia personal durante décadas de intenso contacto con el campo es que en primavera o verano el caminar o pisar, aunque sean dos minutos, por las zonas fuertemente pobladas de conejos, implica con toda probabilidad la incorporación de alguna garrapata a nuestra ropa o a la piel.
Conviene evitar estas zonas con madrigueras o conejos visibles y también las zonas verdes cercanas a los prados y arroyos, donde suelen esperar en la punta de una hierba a que pase algo caliente donde agarrarse.
Todos los manuales indican que es conveniente usar pantalones largos y mejor si van metidos en los calcetines. En mi modesta opinión, lo único que conseguimos con esto es retardar su acceso a la piel mientras llegan a zonas superiores. En mi caso personal, prefiero detectarlas por las leves cosquillas que producen al subir por la pantorrilla.
Las autoridades sanitarias aconsejan el uso de repelentes, aunque desde mi punto de vista no son muy efectivos. Siempre hay que utilizarlos con precaución y dejándose aconsejar por el farmacéutico.
Si se detecta la garrapata sin llegar a engancharse, es mejor no tocarla con las manos y agarrarla con un papel o alguna herramienta. Después conviene aplastarla contra algo duro (dos piedras) hasta que se nota que cruje, pues de otra manera es fácil creer que está muerta y que solo lo esté en apariencia.
Si llega a picar (a mí no me ha ocurrido nunca), la cosa se complica. Es fácil que no notemos la picadura, porque en su saliva aplican un anestésico para no ser localizadas hasta que han conseguido la preciada sangre.
El macho de la garrapata es más pequeño, como la cabeza de una cerilla. Si se instala en un pliegue (ingles, axilas, etc.) es difícil de detectar. La hembra necesita más sangre para los huevos y suele hinchar el abdomen hasta adquirir el tamaño aproximado de un grano de café.
Según nos cuenta el Colegio de Farmaceúticos de Madrid en su publicación "Dípteros y garrapatas: un problema de salud pública". «La probabilidad de transmisión de patógenos por las garrapatas al hombre es baja debido a que, en general, el porcentaje de garrapatas infectado es bajo, salvo en el caso de algunas rickettsias; además, la distribución de patógenos no es homogénea y sigue un patrón fragmentado en áreas que pueden variar mucho en función de la diversidad y grado de frecuentación de los animales de los que se alimentan. En España, sólo un porcentaje relativamente pequeño de las garrapatas son portadoras de microorganismos nocivos para la salud y para poder transmitirlos, necesitan estar prendidas de la piel un tiempo largo, más de 24 horas generalmente.»
Las garrapatas pueden transmitir algunas enfermedades como la Fiebre botonosa o exantemática mediterránea, la Enfermedad de Lyme o la Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo.
En el caso de la primera, la forma de transmisión al ser humano se produce por la picadura de las garrapatas infectadas que proceden del perro. La Enfermedad de Lyme se transmite a los humanos directamente por la picadura de garrapatas y, la Fiebre de Crimea-Congo, puede contagiarse en humanos por picadura de la garrapata, por contacto directo con fluidos del hospedador e incluso entre personas mediante el contacto con fluidos de la persona infectada.
A continuación adjunto una guía del Colegio de Veterinarios de Madrid con algunos consejos para intentar evitar las picaduras y extraer las garrapatas.
Mariano Fernández
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